oscuridad y mi corazón con la luna
solo hay inmensidad, he abierto mi
ventana para ver a la luna brillar
pero con mi corazón apagado solo
queda soledad.
Ya llegó el nuevo día, veo a la
gente pasar, yo sin rumbo por la
vida me marcho a otra ciudad, el
sol ilumina mi rostro y el frío me
hace temblar, buscando en el
horizonte mi vista cansada esta.
Hay gente que te ayuda, hay
personas buenas que siempre
están tras de ti, apoyándote y
deseándote lo mejor, pero por
culpa de unas letras mal escritas
mi corazón y mi alma vagando sin
rumbo van.
Siempre tapado por el frío, el
calor voy buscando y alegría
también, en este día Señor deseo
que me ayudes, te pido perdón, más
si me respondes contenta estará mi
voz.
Autor Juan Alonso Nebreda
2 de Abril del 2013
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