Deseo verte, y en el paseo cotidiano
encontrar ese camino, es la senda que me
conduce hasta ti, necesito ver tu cuerpo para
saber el destino, deseo tocarte tu piel siempre,
para tener esos sentimientos amorosos que
nos provoca esa humedad en los sentidos,
hoy deseo sentir tu amor, saber que mi vida
esta en ti, y en el deseo de amarnos.
Correr y retenerte en mi, y así poder saber
y alcanzar esa felicidad que tu cuerpo me llena
y provoca, mis labios cansados te besaran con
ansiedad, para que tu notes siempre esta fiebre
que me seduce, por eso deseo oír tu voz y tu
fija mirada donde los dos nos sentimos felices.
Y cuando al fin te alcance, sufriré con suma
angustia el tiempo alejado y muy lejano pasado,
con frenesí desbordare todos mis deseos, como
ese gran mar que desea deshacer su oleaje en
la playa, por eso deseo abrazarte y nuestro
camino sea por el sendero que los dos hemos
encontrado en esta vida amorosa.
Mis manos te acariciarán, mis brazos te
abrazaran con muy delicado amor, ese jardín que
posees, ese jardín que buscamos con toda
delicadeza, y sin experiencia y con llamas del
deseo nos abrazaremos, nuestros cuerpos sabrán
comportarse hasta apagar esa llama que nos
quema, hoy más nunca correré, y comprenderas
con ansia que este amor esta firme en los dos.
Autor Juan Alonso Nebreda (España)
18 de Marzo 2019
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