Qué bonito es el verte todos los días,
que hermosura reunes en tu cuerpo
cuando te veo, te tengo en mi ser
siempre, en mi aunque no te vea, la noche
es un misterio y mis caricias se pierden
a través de las nubes, el día está muy
ameno y cordial, el sentirte me da esa
fuerza que necesitamos para amarnos.
Deseo tus anhelos, para saciar estos
tormentos que a veces aparecen en mis
pensamientos, y solo con tu simple estar
y presencia es suficiente para que mi mente
se haga sublime a tú persona, sabes como
conseguir este estar, notas que yo siempre
te estoy amando, y desear esos besos
que nunca tienen fin.
Yo siempre intento verte, pero mis
palabras al llamarte se pierden en esas
nubes oscuras, como diciendo estoy aquí
pero no es posible verte, también sé que
esa humedad del día siempre nos deseamos
y nos sentimos unidos, sabemos que hay
un alma y un corazón para saber que en
este hoy y el mañana, nos deseamos ver.
También sé que en mis mañanas me llamas
y oigo tu voz suave y hermosa, aunque el frío
nos llegue tu estas siempre en mi pensar y
en mi corazón, en el lecho que ocupo siempre
hay un espacio para ti y hoy y siempre deseo
responder a tus llamadas, a veces son
imprevistas pero sabemos que solo el vernos
nos dan ese alimento para fortalecer nuestras
vidas.
Autor Juan Alonso Nebreda (España)
21 de Marzo del 2019
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