Mi alma siente en esta lejanía, pensé
estar acabado, sentí que mi alma sufría y
agonizaba, grite pero en ese momento, un
silbido penetro en mi alma, que haces, te
noto triste, si la verdad dejé de sentir esos
latidos que siempre son de placer y de
amor, es un sentir llano y muy alegre mi
corazón se siente relajado.
Mi cuerpo sintió una profunda alegría y
necesidad de saber y querer tener compañía,
esa compañía llegó a mis sentimientos,
humanamente me sentí repleto de cariño,
con ansia de sentirme feliz, también de
dejarme llevar, dejarse uno sentir que un
ser vela por ti, ese ser es el amor que uno
necesita para vivir en esta oscuridad que
la vida a veces nos castiga.
No hay risas solo honestidad, entre dos
seres que se conocieron en una tarde aburrida,
pero con la simpleza de esa persona, el calor
me llego a mi cuerpo y el hielo que brotaba
de mi ser se rompió para siempre, es un
despertar en un día lleno de plenitud de amor,
aun que a veces estemos tristes es mejor
sentirse amado y tú responder a ello.
Ya no existe agonía en mi cuerpo, solo
penetro una inmensa alegría, en el llegar del
mañana, eso es lo que mi persona está
pidiendo a gritos, que esa agonía del alma ,
en la soledad llegó en ese ser que sin conocerlo,
abrió mi corazón, espero que esto perdure para
ver contenta a mi alma, de lo bueno a veces
cuesta conseguirlo, pero hoy deseo mantener
con firmeza esta grata alegría que llego a mi
alma.
Autor Juan Alonso Nebreda (España)
26 de Septiembre del 2018
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