Me robaste el corazón y el tiempo que
la sostenía, contemplare tu alma para
que en mis manos te vea y serás tú la
razón de mi vivir, esa razón que hoy
mi corazón sangro y en pecho siente
ese ahogo inmenso en mi vida.
Apretad mi alma, para poder beber tu
sangre y tú juventud que mi vida desea
sentirte, abrazar tu sentir que hoy me
has dejado en el lugar no deseado, por
eso a veces es mejor que no aparezca
el nuevo día.
Comentaré tus dudas y desesperación,
tus fatigas y ansias, yo las ahogare
entre las grandes brumas de la vida y te
daré de comer si fuese necesario en
mis manos, mientras en la noche nos
vela a través de la luna, que por mi
ventana penetro y te besaré con calma.
Buscaré tus recuerdos y te recorreré
en calma con mis manos tu cuerpo y con
este beso de amor, a a través del
corazón, dentro del amor para poder
robarte el alma, seguiré tras de ti, pisare
tus pasos, donde quiera que vayas. y
mis brazos querrán tener tu alma para
poder besarla.
Autor Juan Alonso Nebreda (España)
24 de Febrero del 2019
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