Donde estas en estos momentos, donde
están esos ojos que siempre me miran, donde
dejaste tus besos en la humedad de mi boca,
donde están esos besos dulces y apasionados
que siempre nos dimos...¡Dónde están! siempre
fue feliz el despertar a tu lado.
En esta ocasión pronuncie tu nombre y de mi
labios salió la sonrisa del querer, siempre estas
y siempre apareces a mis llamadas, no sé si
alguna vez huyes de mi sombra y no de mi
persona, sabes que soy yo cuando te llamo hoy
si sentí tu llamada dentro de mi ser, aunque tu
sabes que te respondo no te veo.
Ahora bien quisiera oír el sonido triste de la
noche cuando todo está tranquilo y sereno y
sosegado, la música solo nos anima a los dos,
para fortalecer nuestras creencias de amor,
igual que las aves que se sienten felices en
revoloteos, deseo ver mi luna y al amanecer
sentir felicidad en mi cuerpo.
Quisiera tenerte en mis brazos entre el ocaso
del tiempo y el amanecer del día, ver pasar las
horas del reloj y sentirme siempre protegido por
tus encantos, es como ver correr el agua del
manantial siempre sobre la misma dirección,
espero que seamos siempre así y reconocer
que la vida nos entrega en bienestar para estar
el uno con el otro, hoy necesito este amanecer
para vernos felices.
Autor Juan Alonso Nebreda (España)
14 de Octubre del 2018
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