te soñaba que estaba en la gloria a tu lado,
que felicidad tenerte entre mis brazos y
jugar con tu cuerpo, para mi era un placer
lleno de frenesí.
Sueños que parecían reales, soñaba, te
veía, eras tú con tus cabellos enrizados en
mis manos, sabia que no era real pero
quería seguir soñando, eras suave y ardiente
a la vez, me pedías amor.
Te sentí suavemente tus pechos rozaban
los míos, eras un misterio, pero deseaba
abrir ese misterio, tu no deseabas apartarte
de mi, me pedías cariño y me iluminabas
todos los sentidos.
Siempre soñé este día de tenerte en mis
brazos, sabía que eras tú, mis ojos brillaban
de alegría, estábamos juntos dándonos ese
misterioso placer que la vida nos da en esos
momentos en que los seres se aman.
Esta noche pensé dormir, pero tu recuerdo
llego a mi vida, intentaba profundizar ese
sueño de cansancio después de una velada de
disfrute, lo intente pero siempre estabas en
mi mente.la verdad no me arrepiento de
haberte soñado, eras el placer esperado en
el que yo siempre soñé.
Autor Juan Alonso Nebreda
1 de Enero del 2014
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