Sentí llorar a lo lejos, y
lágrimas perfumadas
manaban de mis pupilas
que sentían dolor a lo lejos
y lágrimas de dolor a lo
cerca.
Hoy me siento totalmente
derrotado a esas lágrimas
derramadas, que hacen
huella a mi corazón y a mi
alma.
Las lágrimas que caen al
suplicar la esperanza de
querer y no poder
conseguirte, y sentir esta
vida en el sufrimiento de
este valle de lágrimas y
a su vez de estar siempre
agobiado y hundido en el
llanto.
Necesito tu consuelo,
necesito verte y suplicarte,
pero no respondes a mis
llantos de esta vida llena
de sufrimientos, pero
nunca negare que derramé
lágrimas por amor.
Autor Juan Alonso Nebreda
30 de Enero del 2013
Nunca negare qué derrame lagrimas por amor
ResponderEliminarEs muy tierno gracias juan por tus poemas