Deseo volar, como si tendría las alas
del majestuoso buitre, para poder
encontrar ese amor que me sigue
negando y que vuela de un lado para
otro, la última vez que lo vi en la
torre del castillo de la colina.
Es un castillo lleno de firmeza, pero
es su rostro el que deseo ver, aunque
no seas completamente mía y al verte
mis sueños se rompen, espero que el
poder volar te encuentre.
También te vi lejos, en un velero
lleno de pescadores, que con sus
cañas pescaban en la orilla del mar,
pero yo al verte gritaba y una vez que
oíste mi voz desapareciste del lugar.
Nunca serás del todo mía, tu
majestuosa luz, me hace suspirar,
pero yo con ternura corrí al encuentro
y te dije yo no puedo amarte a medias,
solo sé que intentare y mi alma me
dice eso está hecho.
El sueño se rompe y la sigo buscando
en las sombras, y es el tiempo el que
necesito para encontrarla y decirla en
el hondo de su corazón que no huya
que la quiero y que realmente la amo.
Autor Juan Alonso Nebreda
25 de Enero del 2013
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