llevo mi voz hasta el otro lado del
océano, tu estabas esperando esa voz
fuerte y ronca a la vez, aunque nunca
la has escuchado tú sabes que es esa.
No hizo falta saber, siempre
supiste que era yo quien te llamaba,
siempre supiste que el aroma de mi
piel despide el aroma de las semillas
de los bosques que cada mañana
percibo de ellas.
Sé que me esperas y te abrazare
fuertemente a tu cintura, yo bebí de
tus besos, y también bese tus pechos
llenos de calor que siempre me
esperaron.
Yo te busque pero cada vez
estaba más confuso con tus
sentimientos, tú siempre me calmas
esa sed que tengo de tu esencia
femenina, te ríes a mis sentimientos,
pero allanan mas los horizontes de mi
vida.
Tus besos se apoderan de mis
sentidos, y mis poros de la piel se
abren cada vez que tú me tocas y me
acaricias, así los logros del amor están
conseguidos.
Autor Juan Alonso Nebreda
5 de Septiembre del 2013
Que bonito poeta ,me encanto gracias por tan bellos poemas
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