entre esa lluvia fina que nos traspasa ante
nuestras defensas, eres ese mármol
cristalino que con tanto amor destrozas mi
corazón y con la alegría de tu alma que me
pide más de mi.
Te abrazo ante esta brisa mañanera que
los dos gozamos en nuestros paseos
matinales, descalzos por esa playa salvaje,
solo nuestros sentimientos permanecerán
alegres y llenos de ternura ante este juego
ardiente de nuestro amor.
Somos aves de paso que jugamos ante
esas ramas espesas al amanecer del alba,
haciendo nuestros vuelos, procurando
seguir en el juego para que nuestras
pasiones permanezcan y obren en el
deseo de esta pasión de amarnos.
Siempre estas en mis sueños mujer,
esta realidad que en las noches largas y
oscuras te llamo sin respuesta, tu nombre
esta en mi mente, y en mi soledad solo
deseo esa voz que para mi es este amor
que un día conquiste pero hoy me siento
perdido en la oscuridad.
Autor Juan Alonso Nebreda
27 de Junio del 2015
Gracias, Juan Alonso, un abrazo, amigo,
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