trovar, para quitar esta angustia que me
cuesta superar, mi corazón late y hoy sus
quejas me da, soñar con esa ilusión
aprendida y tú corazón amar.
Tú eres ese ser que mi vida adora, mujer,
mujer el sonar de mi guitarra fuiste mi
testigo fiel, aquellas horas pasadas que en
mi sentir no se fue, deseo pasar página del
poderte contemplar.
Deseo que recuerdes mis poemas, que
un buen día cante, a ti bendita mujer y se
que sin ti desapareceré, deseo esa
esperanza y ese consuelo de mi pensar
hacia ti, hoy sé que nos abrazamos y viste
mi sentir hacia ti.
Mi alma te espera siempre y nunca te
dejo de amar, deseo verte mañana para que
sepas que mi vida eres tú, hay bella mujer
a la que siempre adore, aquellas horas no
sé olvidan, siempre llenan mi pensar, lo
mismo que mi guitarra nunca dejara de
soñar.
Autor Juan Alonso Nebreda (España)
18 de Diciembre del 2017
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