caigo en el centro del mar, las aguas están
tranquilas, como me siento yo hoy al sentir
ese calor del sol que en el día de hoy es
muy abundante y caluroso, me siento y
pienso mirando al horizonte.
Me siento acompañado, pero solo en
persona, pienso y vuelvo a mirar en el
sentir que hoy no tiene consuelo mi alma
porque esta vacía, pienso y nunca
encuentro esa voz que me aplaque este
sentir tan agobiante pero hoy esperanzador.
Miro y mi risa se quiebra y se rompe al
pensar que hoy es lejano, pero el mañana
puede estar más cercano para que este
pensar mío sea más ameno y más
pensativo para este futuro que siempre se
ve lejano, pero a veces se ve más cerca.
Vuelvo a mirar lejos olisqueando el
pasado, mis ojos firmes y mis manos
serenas recordando aquellos tiempos
felices que la vida nos concedió, yo solo
busco un futuro, que siempre aunque no
se sienta, puede que el mañana, mi
reposar en el mar sea más alegre para mi
vida, que en el ayer se quebró, pero el
mañana lo espero con sumo esmero y
mucho amor.
Autor Juan Alonso Nebreda (España)
25 de Junio del 2016
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