Estas en mi vida y en mi memoria, te
buscare en ese horizonte, que al final se
cruzan los caminos, te protegeré y curare
ese alma, que aunque este sana sigue
perdida .
Buscare por esos bosques que en
sueños cabalgabas por él, en cada paso
oleré ese aroma que vas dejando entre
esos tomillos y espliegos rodeados de
arenales.
¿Por que? estamos tan lejanos,
maldigo al destino, por sentir esa
separación tan lejana, me dejaré llevar
por la corriente de ese río tan inmenso,
que sé que me podrá llevar a tu lado.
Mis llantos y mis lágrimas las oyes,
caen como si fuesen una tormenta que no
tiene fin, deseo tu desnudez y sentirme
correspondido en el deseo, tú sabes que
me tienes en esa lejanía, pero deseo esa
inocencia de mujer que en tú vida has
enseñado.
Autor Juan Alonso Nebreda
18 de Noviembre del 2014
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