Jardín de mi huerto, que precioso y
florecido esta, pero siempre hay una
rosa que engrandece este lugar, su
color purpura y su aroma siempre
está presente y cuando te acercas hace
que la quieras más.
Yo soy su jardinero, cuido del rosal
con mucho cariño y ardor, pero esa
rosa siempre me llama su atención te
ofrezco esta aroma para que siempre
te quede dentro de tu corazón.
Siempre al amanecer y atardecer,
estaba esa rora mirando mi llegada
para hablarme, pero yo jamás la
entendí, solo me pedía cariño para
ella y también para las demás, pero yo
siempre a ella era a quien mi corazón
llenaba.
Yo se que no es la rosa, que es ese
ser que siempre está pendiente de mi,
me dice que me quiere, pero a esa rosa
la cuidare como si se tratase a quien
deseo amar y sentir su calor de ser
amado, pero siento su calor a través de
la rosa.
Autor Juan Alonso Nebreda
23 de Julio del 2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario