Los inmensos luceros me llaman
sin cesar, para buscar a mi amada que
me espera en aquel lugar, nos
acariciamos de noche al son de mi
cantar para ofrecerte estas flores con
una aroma sin igual, para perfumar tu
lecho donde yo comparto este cariño
celestial.
Bella dama bello amor, eres mi
tesoro, este cariño te imploro con esta
canción sin igual, te trovo preciosa
mía estas armonía partiendo de este mi
corazón.
Deseo estar a tu lado preciosa mía,
volar con estas alas desde la tierra para
buscar esa ilusión, eres tú mi dulce
amor, que con mis sueños te adoro con
esta flor, a ti te imploro mujer amada
con este encanto y fervor y buscarte mi
fiel soberana para amarte con esta dicha
mayor.
Autor Juan Alonso Nebreda
17 de Marzo del 2015
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