Hoy sentí hambre, sentí esa necesidad
de tenerte en mis brazos, pero no pude
hacerlo, si sentí en este silencio de la vida,
te quise hablar, pronuncié tú nombre para
decirte eres este ser de mi vida llena de
ilusión y sentimientos.
Mi sentir pidió tu desnudez de tú alma,
tú te sacrificaste y me entregaste ese sentir
que los dos deseamos, se me acalora la piel
pero en ese instante aparecen esos
sentimientos y me siento de esta forma
afortunado.
Estamos atrapados y me contagias cuando
pienso en tu boca y en tus besos, te oigo
gritar mi nombre y corro presuroso a tú
encuentro, los dos nos sentimos abrazados y
gratificantes en este complacido amor.
Siento hambre de verdad de ti, sabes que
mi vida está pendiente de esa tuya que a veces
está llena de espesura, solo deseo verte feliz
aunque a veces mi alma sienta humillación
en los deseos, sabes que la vida nos da y a
veces nos quita, pero hoy soy afortunado con
tú sentir de amar.
Autor Juan Alonso Nebreda (España)
24 de Septiembre del 2016
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